¿Acaso era posible lo que mis ojos estaban viendo? Se me hacía tan familiar ese rostro…
-¿¡Eres tú!?- dije con los ojos como platos.
-No, creo que me estás confundiendo…- dijo tratando de darme la espalda.
-No, no, no aguarda un segundo- dije tratando de que me volteara a ver- ¡Tú eres el chico del parque!
Al decir esto el chico me miró de nuevo y se volteó por completo.
-¡Ja! ¡Lo sabía!- dije con una sonrisa- Incluso tienes los mismos lentes puestos- dije al ver de nuevo los conocidos lentes obscuros.
El chico desconocido, bueno, no tan desconocido, porque ya lo había visto antes, solo que no sabía su nombre, soltó un suspiro de alivio.
-Entonces si eres tú la chica que no me quiso decir su nombre- dijo con una media sonrisa.
-Hahaha no es que no quisiera, te dije que era un secreto- dije guiñando un ojo.
-Claro- dijo riendo- Oye creo que todos nos están viendo- dijo tímidamente.
Volteé a ver, y las pocas personas que estaban ahí, la mayoría adultos, nos estaban observando atentamente como si fuéramos parte de un show navideño para entretener a la clientela.
Reí tímidamente- Oh, es cierto.
-Hum, bueno, ¿quieres salir a caminar?- dijo mientras me abría la puerta para que saliera.
-Claro, sería estupendo.
¡Wow! ¿Era posible cambiar de estado de ánimo tan rápido? ¿De estar triste y completamente desolada a feliz y pues… ¡Feliz!? Era increíble.
-Y bueno… ¿Piensas decirme tu nombre, chica misteriosa?- dijo mientras caminábamos sin rumbo fijo por la nieve.
-Hum depende… ¿Planeas quitarte esos lentes? Digo, estamos en medio de la noche- reí.
-Hahaha, ¡ya sé!
-¿Qué?- pregunté con curiosidad.
-Si adivinas de qué color tengo los ojos, me los quitaré- sentenció.
-Hum, ¿Y si no?
-Me dirás tu nombre- dijo con una sonrisa.
-Amm… Está bien- acepté.
-Ok, pero te lo advierto- dijo deteniéndose y volteándome a ver- Yo nunca pierdo.
-Hahaha, ya veremos- sonreí desafiante.
-Bueno, adivina.
-Hum, haber, veamos- dije acercándome a él.
-No se vale quitarme los lentes- dijo riendo.
-Hahaha, ya lo sé, Es que ¡woow! Están muy obscuros.
Lo seguí mirando por unos tres minutos mientras él seguía riendo.
-Hum, bueno, haber, tu cabello es claro…- dije lentamente- Así que tus ojos deben de ser….
-¿Sí?...
-¡Azules!- sentencié.
-Hahaha Nop- dijo el triunfante.
-¿¡Qué?!- dije incrédula.
-Te lo dije, yo nunca pierdo.
-Eso no es justo- dije cruzándome de brazos como una niña pequeña que no recibe su dulce favorito.
-Bueno, ahora dime tu nombre.
-Amm… ¡Nop!- dije mientras corría entre los puestos de la kermese donde estábamos paseando.
-¡Oye eso no es justo!- dijo mientras corría tras de mí.
-¡Te lo diré solo si me alcanzas!
Corrí por todos lados como una niña pequeña, podía sentir como estaba atrás de mí, pero yo era una gran atleta en la escuela, así que nadie me había ganado en lo que a correr respectaba.
Pasé a lado de un puesto en donde vendían bufandas coloridas, sombreros y lentes y me detuve. Tome unos lentes casi igual de obscuros que los de él y me coloque una bufanda rosa muy linda.
-¡Ja! Te alcancé- dijo mientras se detenía al lado mío.
-Hahaha, solo porque te dejé ganar- dije enseñándole la lengua.
-Hahaha! ¿Qué te pusiste?- dijo al ver mi aspecto.
-Hey! Si tú vas a usar lentes ¿Por qué yo no?- dije riendo.
-Hahaha que sonsa eres- dijo sonriendo.
-¿A quién le dices sonsa chico con aspecto de asaltante?
-¡Oye! Ya no parezco asaltante ¿vez?- dijo señalando su atuendo.
-Bueno, ya no traes la sudadera con capucha- dije evaluándolo- Y ahora traes un esmoquin muy elegante- dije mientras daba vueltas alrededor de él mirándolo fijamente- ¡Pero sigues trayendo lentes y puedes ser un gánster!- dije riendo.
-¿Sabes que estás bien loca verdad?- dijo entre risas.
-Hum, me lo han dicho…
En ese momento la dueña del puesto donde estábamos parados, que era una viejita que se veía dulce y tierna, se acercó a nosotros.
-Y bien chicos, ¿Van a comprar algo?- nos dijo sonriente.
-Ah, lo siento- dije quitándome los lentes y la bufanda y depositándolos en su lugar- Solo estamos viendo.
-¿Te gustan?- me preguntó él mientras tomaba los lentes y la bufanda.
-¿Qué?, no, no, no- dije nerviosamente.
-¿No?- pregunto él mientras me volteaba a ver.
-Este, bueno, sí, pero….
-Pero nada jovencita- rió la viejita- si su novio quiere comprarle un obsequio de navidad debe de aceptarlo.
-¿¡Novio!?- dijimos él y yo al mismo tiempo.
-¿Entonces se lo envuelvo para regalo o se lo llevan así?- dijo con una sonrisa.
Podía sentir todo el calor acumulado en mi rostro y no me atrevía a voltearlo a ver a él.
-Este amm… nos los llevamos así- dijo él mientras le extendía un billete.
- ¡¿Qué?! No, no, no te molestes- dije completamente apenada.
-Ok, les regalaré una bolsita en donde meterlos- dijo la viejita mientras iba a buscarla.
-Oye, no te hubieras molestado…
-No es molestia, tómalo como mi regalo de navidad- dijo con una sonrisa.
Me quedé como una tonta viéndolo sorprendida y bobamente. Era el detalle más lindo del mundo.
En ese momento la viejita salió con una bolsa roja de cartón, no de esas de plástico, si no de las cuales en donde te dan un regalo.
-Aquí tiene- dijo la viejita mientras le entregaba al chico la bolsa- Ah, y por cierto, es muy linda, tienes suerte- dijo guiñándole un ojo.
Él comenzó a reír nerviosamente y yo me puse tan roja como una fresa.
Después de eso nos dimos la vuelta y comenzamos a caminar.
-¡Feliz Navidad, jovencitos!- dijo la viejita desde su puesto.
Los dos nos volteamos y sonreímos.
-¡Gracias!- dijimos al mismo tiempo.
-Oh, amm feliz navidad- dijo mientras me entregaba la bolsita.
-Gracias- dije con una pequeña sonrisa tímida- Oh, y amm (Tn) ____ - dije en voz baja.
-¿Qué?- preguntó confundido.
Sonreí- Mi nombre es (Tn) ___.
Pude ver como él también sonreía ampliamente.
-Feliz Navidad (Tn) ____.
Después de eso caminamos tranquilamente por el mismo parque en el que nos habíamos conocido por la mañana, si de tarde era hermoso, de noche lo era más.
A esta hora miles de enamorados paseaban a la luz de la luna y patinaban por el lago, haciendo que el ambiente tuviera un toque especial, totalmente especial…
-Entonces… ¿me dirás de que color son tus ojos?- dije con una sonrisa mientras miraba la grava.
-Creí que el trato era que tus los adivinaras- dijo riendo.
-Oh, vamos- dije dándole un empujón amistoso- No podré dormir si no sé de que color tiene los ojos el chico de los lentes obscuros- reí.
-Son miel- dijo al final.
-¿Miel?- pregunté encantada.
-Sí, ¿Por qué?
-No se, siempre me a gustado ese color de ojos- dije encogiéndome de hombros para restarle importancia.
-Los tuyos también son lindos- dijo mientras me observaba con una media sonrisa.
-¿Cómo lo sabes? Hahaha siempre traes esos condenados lentes que te impiden ver bien, además con ese color de ojos yo no dudaría en presumirlos- sonreí.
-¿Estas tratando de convencerme para que me los quite?
-Algo así….- reí
-Ya te dije, prefiero dejarlo en misterio- sonrió divertido.
-Oh vamos, al menos dime tu nombre- le pedí mientras nos sentábamos en una banca.
-Nop, te lo dejaré en misterio.
-¿Tanto odias tu nombre?
-Hahaha no, para nada.
-¡Ush! ¡Si que eres raro!- dije rindiéndome.
-Pero así te caigo bien.
-Ammmm……
-¿O no te caigo bien?- preguntó fingiendo extrema preocupación.
-Bueno, para saber si me caes bien- reí- tendrás que pasar…. una especie de prueba.
-¿De qué se trata?- cuestionó intrigado.
-Primero lo primero, ¿Cuántos años tienes?
-Hahaha ¿Mi edad importa para saber si te caigo bien?
-Hum, no en realidad, pero admite que fue un buen intento para saber al menos una cosa de ti- dije sonriendo.
-Hahaha tengo 17.
-¿¡Qué?!- dije asombrada- woow no los aparentas Hahaha.
-Todo el mundo dice lo mismo- dijo divertido- ¿Cuántos me calculaste?
-Unos mmm… 16
-Es solo un año Hahaha ¿Cuánta diferencia puede haber?
-Bueno, cuando tienes compañeros que dicen que tienen 17 y parecen de 20…… Hahaha me comprenderías.
-Hahaha ¿Cuántos tienes tú?
-Adivina- dije con mirada misteriosa.
-Hum, veamos- dijo mientras me miraba de arriba abajo atentamente haciéndome sentir un tanto apenada.
-Vamos- dije riendo- ¡Tampoco tengo 50!
-Hahaha ¿17?- pregunto lentamente.
-¡¿Tan grande me veo?!- dije asombrada.
-¿No tienes esa edad?- dijo sorprendido.
-Hahaha nop, tengo 14, prácticamente 15- dije con una sonrisa.
-Woow, te juro que no los aparentas.
-Hahaha todos dicen lo mismo- reí- Hum, ¿te das cuenta? Tú pareces más pequeño y yo más grande Hahaha.
-Sí, pero aun no me has dicho cual es la prueba- dijo recordándome.
-Oh, es verdad, bueno, ¿Cuál es tu cantante o grupo favorito?
-Hum tengo varios- dijo pensativo- pero creo que al que más admiro es a Usher.
-Tienes buenos gustos- dije con una sonrisa.
-¿Te gusta?
-Sip, de hecho fui a su último concierto el pasado mes, ¡Fue increíble! – Dije recordando todo con emoción- Amo la canción de You got it bad.
El chico me miró sorprendido para después sonreír ampliamente.
-Esa también es mi canción favorita…
-¿Hablas en serio?- dije emocionada- Woow ¿Dónde estuviste todos estos años?- dije dramatizando y riendo.
-Lo mismo me pregunto yo…- murmuró suavemente para que no lo escuchara.
-¿Dijiste algo?- dije haciéndome la loca.
-No, nada- sonrió- Así que fuiste a su concierto en Canadá.
-¿Cómo lo sabes?- pregunté asombrada.
-Hahaha ahí fue su último concierto.
-Ah, sí- dije lentamente.
Cuando el chico pronunció la palabra Canadá una tristeza instantánea que se producía en mi interior cada vez que veía o escuchaba algo relacionado con el país, se apoderó de mí y me hizo recordar todo lo que le había sucedido a mi trágica vida, no culpaba al país, pero era inevitable asociarlo con los acontecimientos… Era por eso que quería ocultarle a este chico extraño todo lo relacionado con mi “verdadera vida” si es que se le podía llamar así, porque sinceramente para mi era una farsa que lo único que hacia era hacerme sufrir, no quería recordarlo, y más cuando me la estaba pasando de maravilla con él.
-¿Entonces viajaste de aquí a Canadá solo para ver a Usher?- preguntó asombrado.
-Sí, ¿Qué puedo decir? Era el último concierto del tour y por tanto el más especial- me inventé una escusa.
-Sí, fue asombroso…
-¿Tu también fuiste?- pregunté con curiosidad.
Demasiadas coincidencias ¿No?
-Este yo…- dijo nervioso.
-Ah, ¡claro que fuiste! - dije dándome un golpe en la frente con la palma de la mano – Había olvidado que me habías dicho que vives en Canadá.
-Ah, sí, claro hehehe- dijo nervioso, pero lo pasé por alto.
-¿Y que parte te gustó más?- dije intrigada.
-Hum- dijo pensativo- Creo que la parte donde salieron los artistas invitados.
-Oh, sí, fue lindo ver los duetos- concordé.
-¿Qué dueto te gustó más?- preguntó atentamente.
-Todos estuvieron fantásticos- dije al instante- pero creo que el que mas me gustó fue el que hizo con Justin Bieber.
-¿¡Qué?!- dijo sorprendido- quiero decir, si fue bueno….
- Hahaha Sip- dije mirándolo divertida.
-No sabia que te gustara Justin Bieber- dijo tosiendo al final para restarle importancia.
-No, no me gusta.
-Entonces….- me miró confundido.
-O sea, puede cantar bien y eso, y tener una que otra canción buena, pero de ahí a que me guste esta muy lejos- aclaré.
-Oh, lo dices como si lo odiaras…- dijo lentamente.
-No es odiarlo, mas bien creo que es otro de esos artistuchos que se creen mucho y que solo piensan en si mismos y en como promoverse, esas personas me molestan demasiado, no les importa nada aparte de qué ropa de marca usar o qué escandalo causar para hacerse mas famosos a costa de lo que sea, y pff su ego es enorme, solo llegan a la cima y pierden el piso- le expliqué convencida.
-¿Entonces te cae mal como persona?
-Ya te dije, siento que es así, pero pues no canta mal ni nada.
-Pero no lo conoces, ¿que tal si es todo lo contrario a lo que dices?
-Pues no lo se, y nunca lo sabré así que da igual, además no creo que le importe lo que opine una niña como yo cuando tiene a miles de tipas muriendo por el ¿Qué puede ser una de un millón?
-Mucho…- susurró.
-Pero parece como si a ti te agradara- lo mire con curiosidad.
-No, ¿agradarme? Ni que lo conociera- dijo rápidamente- pero… solo creo que es una persona como cualquier otra, no creo que sea mucho como tu dices.
-Ver para creer- sentencié- Hahaha sabes, creo que eres el primer chico al que escucho decir cosas positivas de Justin, normalmente dirían algo como Justin Gayber, o canta como niña y esas cosas.
-Hahaha no soy de esos que critican a la primera persona que se les topa en frente, soy raro ¿Eh?- me dijo sonriendo tímidamente.
-Lo normal- dije riendo- Es bueno que no seas como los otros chicos.
-¿A que te refieres?- preguntó atento.
-A que eres único y eso es muy valioso- hice una pausa- nunca me ha gustado ir con la corriente…
Después de eso nos perdimos en un silencio que fue llenado con los canticos navideños que se oían a lo lejos y alegraban el entorno.
Siempre me había encantado la navidad, me fascinaba la idea de adornar la casa con series de colores, esferas, el típico árbol, salir a jugar a la nieve y más que nada, estar con mi familia…. Pero todo eso había quedado atrás, si, ahora navidad era sinónimo de todo el sufrimiento que había en mi interior, jamás podría volver a amar tan adorada fecha, lo dudaba, y peor aun cuando no podía tener a mi familia cerca, lo se, me dirán ¿Qué no toda tu familia estaba en casa de tus abuelos? En teoría si lo estaban, pero yo no me refería a ese tipo de familia, yo me refería a la familia que había tenido años atrás cuando tan solo era una niña…
-¿(Tn) ____?- dijo el chico sacándome de mis pensamientos.
-Ah, ¿si?- contesté torpemente.
-Hahaha te pregunté que si querías seguir caminando.
-Oh, lo siento, estaba algo distraída- sonreí con tristeza.
-¿Estás bien?- preguntó preocupado, algo que me enterneció demasiado.
Me puse de pie rápidamente y le sonreí
-Sí, no te preocupes ¿Caminamos?
El chico me miró confundido por unos segundos y después me devolvió la sonrisa mientras se ponía de pie.
-Hum ¿Te puedo hacer una pregunta?- me dijo dudoso mientras caminábamos por el estrecho sendero.
-Por supuesto- dije mientras metía mis manos a los bolsillos de mi chaqueta.
-¿Qué hace una chica tan linda y divertida sola en navidad?
-Oh- exclamé, su pregunta me había tomado desprevenida y sus halagos me habían hecho sonrojar- Bueno, no estoy sola, estoy con un chico que no me quiere decir su nombre ni mostrar su rostro.
-Hahaha bueno, pero antes de que nos encontráramos estabas sola ¿Me equivoco?
-Si…- dije lentamente- Es algo complicado, pero ¿Qué hay de ti? Tu también estabas solo antes ¿no?- me apresuré a preguntar.
-Supongo que también es algo complicado- dijo desviando su mirada al cielo.
-¿Es algo malo?- pregunté preocupada.
-¿Lo tuyo lo es?- dijo evadiendo mi pregunta.
Fruncí el ceño un poco – depende de la persona que seas.
-¿Qué quieres decir?
-Si eres mi familia, dirías que yo soy una mocosa exagerada, si fueras yo, sabrías que tu enojo tiene justificación.
-Bueno, lo que importa es lo que tu pienses, no lo que piensen los demás- me dijo dedicándome una sonrisa.
-Supongo que si… pero hay veces que lo que piensen o decidan los demás te afecta a ti.
El chico me miró atentamente, supongo que sin saber que decirle a una chica que estaba peleada con el universo mismo.
Sonreí un poco- Tampoco es que quiera que entiendan, solo es complicado….
-No, te entiendo, yo… supongo que mi vida es difícil, nunca sabes si en verdad las personas están siendo sinceras contigo o te quieren por quien eres o porque tienes- dijo con tristeza.
-Debe ser difícil…- conteste torpemente sin saber muy bien que hacer o decir.
-Bueno, al menos me alegra saber que no estamos solos en Navidad, de no haberme encontrado contigo estaría solo en un café- sonrió.
-Hahaha lo mismo digo.
En ese momento había quedado clara una cosa, éramos dos extraños que no se conocían en lo absoluto, no sabíamos exactamente que había sido de la vida del otro, pero eso no importaba, porque lo único importante era que podíamos disfrutar de la compañía del otro sin temor a ser juzgados, era algo especial…
El timbre de un celular comenzó a sonar cortando el hilo de mis pensamientos, no podía ser el mío, ya que había salido apresuradamente y solo me había dado tiempo de tomar mi dinero.
-Oh, discúlpame- dijo el chico mientras contestaba su llamada.
-Sí, no te preocupes.
Me alejé un poco para no incomodar y que no pensara que era una chismosa que quería oír sus llamadas Hahaha.
Lo único que logré percibir fue que estaba siendo cortante con la persona del otro lado de la línea, ¿Seria esa una de las personas a las que se refería como las que solo lo querían por lo que tenia y no quien era? No lo sabia, pero por alguna extraña razón me enojó que existieran personas que lo tratasen así, tal vez no lo conocía mucho, esta bien, no lo conocía en lo absoluto, pero por el tiempo que habíamos pasado juntos pude percibir que era una persona de verdad, genuino.
-¿Estás bien?- le pregunté cuando hubo terminado su llamada y llegado a mi costado.
-Este… si…- dijo no muy convencido y con aire triste- Era solo una…. amiga.
-Oh- dije sin saber qué decir.
-¿Vives cerca de aquí?
-Si, la casa está a una manzana más o menos.
-¿Quieres que te acompañe? Es que surgió algo y tengo que irme- dijo algo triste.
-Ah, no te preocupes- le sonreí- yo puedo irme sola.
-¿Qué? ¿Y dejarte sola en la noche? Por supuesto que no- dijo firme.
-Hahaha puedo cuidar de mi misma, no te preocupes.
-¿Estas segura?- dijo nada convencido.
-Claro, además conozco esta ciudad como la palma de mi mano, es muy segura- dije sonriendo.
-Oh, está bien- sonrió- Fue un gusto volver a verte (Tn) ___
-Lo mismo digo Chico sin nombre- dije riendo.
Me despedí de él con un gesto de la mano y me di la vuelta mientras caminaba por la banqueta con una sonrisa en el rostro.
-¡(Tn) ___!- escuché que gritaba detrás de mí.
-¿Sí?- dije dándome la vuelta y viéndolo a lo lejos.
-¿Nos volveremos a ver?
Sonreí- Si el destino así lo quiere…
Me di la vuelta y continué con mi camino a casa de los abuelos, al menos no toda la velada había sido horrenda… eso me gustó.
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Narra él:
Vi como (Tn) ____ se iba alejando por la avenida, no quería que fuera sola a casa, pero ella había insistido y si trataba de convencerla tardaría más en llegar, tampoco era que me importara demasiado el llegar a tiempo o no, pero no quería decepcionar a nadie.
Al menos hablar con ella me había hecho olvidar todo lo que había pasado, esa chica era increíble, era hermosa, inteligente, divertida, simplemente única… y no sabía si algún día la podría volver a ver… esperaba que si. Pero si lo hacia ¿Qué pasaría con mi secreto? ¿Lo descubriría?
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Hola chicas!!! aquí les dejo el nuevo cap n.n espero que les haya gustado =)Porfis comenten y así puedo saber si les está gustando o no mi nove si?? así que comenten y díganme qué les pareció =D
Y muchisimas gracias a Belen n.n gracias por leer la nove y comentar y sube otro cap amooo tu nove!! =)
Gracias!!!
Las quieroo
Andy....
ohhhhhhh!!!!! el destino me ama !! encontrarme dos veces con el lindo de.. nuestro príncipe es supe genial
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